¿Ultra… qué?

Está claro que si nos bebemos diez litros de cerveza, no es lo mismo tragárselos en un segundo que hacerlo a lo largo de una semana. Aunque la cantidad de líquido sea la misma, en el primer caso seguramente moriríamos reventados mientras que en el segundo simplemente pasaríamos una semana muy agradable. Con la luz ocurre algo parecido. La potencia es:

formula Potencia

por tanto, aunque la energía de un pulso láser sea relativamente pequeña, si conseguimos reducir bastante su duración podemos lograr una potencia instantánea gigantesca, una especie de tsunami de luz. La materia reacciona ante esa avalancha de luz de manera muy distinta a como lo haría si recibiera la misma energía durante un intervalo largo de tiempo, igual que tu estómago si te tomas los diez litros en un segundo.

Cervezas

¿En cuánto tiempo eres capaz de bebértela?

Está claro que si somos capaces de comprimir pulsos de luz láser hasta duraciones tan pequeñas como unos pocos femtosegundos, la potencia que podemos conseguir es enorme. De hecho la potencia más alta que se logra actualmente con láseres es del orden del petavatio (mil billones de vatios) y se consigue bien con altas energías y duraciones de pulso moderadas (50 kilojulios en 50 picosegundos) o bien con energías moderadas en pulsos ultracortos (50 julios en 50 femtosegundos), dependiendo de las aplicaciones del láser. Pero desde el punto de vista de la materia que reacciona con la luz, lo que importa no es tanto la potencia como la intensidad. La intensidad es:

fórmula Intensidad

Para entender esto pensemos en la lluvia. Nos pueden decir, por ejemplo, que se han recogido 50 litros en una hora pero, para que esa información sirva de algo, nos tienen que especificar el área sobre la que ha caído. Si el área es un kilómetro cuadrado se tratará de un calabobos, pero si es un metro cuadrado podremos estar seguros de que ha causado serias inundaciones.

Lupa
La intensidad es una medida de la concentración de luz.

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